Sabores de México: Cómo el Maíz Transformó la Cocina Mexicana
Desde las tortillas, que acompañan casi todas las comidas, hasta el pozole, los tamales y el atole, el maíz ha sido el hilo conductor que une a generaciones mexicanas en torno a la mesa.
Pero, te has preguntado ¿Cuándo elegimos este ingrediente para crear una gastronomía que gira en torno a este?
El maíz ha sido el alma de la cocina mexicana desde tiempos inmemoriales. Por ejemplo, para las antiguas civilizaciones mesoamericanas, como los aztecas y los mayas, este grano sagrado no solo era un alimento básico, sino también un símbolo de vida y prosperidad.
Su relevancia era tanta que se reflejó en mitos y leyendas, como el Popol Vuh, donde se narra que los seres humanos fueron creados a partir del maíz.
Con el paso de los siglos, el maíz se convirtió en el protagonista indiscutible de los platillos tradicionales mexicanos. Cada variedad de maíz –blanco, amarillo, azul y rojo– tiene un papel especial en la cocina, aportando sus sabores, texturas y colores únicos.
En Broka, el maíz ocupa uno de los lugares centrales en nuestra propuesta gastronómica. Trabajamos de cerca con pequeños productores locales que cultivan variedades nativas de maíz, como el maíz criollo, preservando prácticas agrícolas ancestrales. Este enfoque no solo nos permite ofrecerte sabores auténticos, sino también fomentar un sistema alimentario más equitativo y respetuoso con la tierra.
Al degustar nuestros platillos, como los tamales de frijol y hoja santa, podrás experimentar la profundidad de las tradiciones culinarias, mientras apoyas una forma de alimentación que honra al maíz y otros ingredientes nativos y orgullosamente mexicanos.
En Broka, celebramos al maíz no sólo como un ingrediente, sino como un símbolo de resistencia, historia y conexión con la tierra. ¡Ven y descubre cómo el maíz sigue transformando la cocina mexicana, un plato a la vez!